Descripción
La gaura es una planta vivaz todoterreno puede vivir en todo tipo de climas, ya que tolera el frío intenso (-23º, zonas 6-11) y la sequía.
Las ramillas son largas y poco ramificadas, pero muy numerosas. Alcanzan desde los 60 centímetros de los cultivares compactos, ideales para tiestos, al metro de altura. Suelen ser verdes, pero en algunas variedades lucen tonalidades burdeos o amarillas. Las hojas son muy pequeñas, generalmente verdes. Pierde el follaje en invierno.
La gaura produce de mayo a octubre pequeñas flores generalmente blancas o rosadas, en tonos que van desde el muy claro al carmesí.
La gaura no exige apenas cuidados, excepto podar a ras del suelo los tallos secos cuando ya ha dejado de florecer, para que rebrote con fuerza en primavera. Lo ideal es plantarla en primavera u otoño, a razón de cuatro ejemplares por metro cuadrado. Se resiembra de forma espontánea. También se multiplica por división de mata.